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From Worrying about Tomorrow to Acting with Courage Today: Anita Methodist School, CIM, and GTP
Let me introduce myself first. I am the principal of Anita Methodist School in Chennai, India. We have 120 staff who work together to serve 2,100 beautiful students. I am married and have two grown children. My family loves God, and they stand with me as I serve the school.
Throughout my personal walk with God and my journey as a school principal, God has always met my needs. He never fails to show up just when I need Him. He was present at the webinar organized by Christian Institute for Management where I listened to Dr. Gary Hoag, GTP CEO and Ms. Ereny Monir, GTP Global Trainer.
Webinar hosted on 24 April 2020 by Mr. Anand Joshua, CIM Executive Director and GTP Regional Facilitator for South Asia
Joan with Anita Methodist School students
In addition to this, the school faced financial challenges. We were unsure when we would be able to collect school fees due to the lockdown. The staff had been working hard and they deserved their salaries. But how would we pay them? Decisions had to be made with the available financial resources. I worked and reworked new fees and salary structures multiple times.
I felt unsure. The welfare of the diligent teachers who need their salaries and the struggling parents who might not be able to pay school fees were getting to me. I was getting drained by the endless staring at spreadsheets and discussions with the finance department. I kept sighing and asking, “Lord, what should I do?"
The webinar was an answer to my prayers. When the picture above of the man kneeling with the Bible by his side was shown and Gary said that was the posture we should take, I said, “Oh Lord, that is what I should do…” I also heard that, “The work we are doing is His, not ours.” The Spirit of God helped me see that the staff is His responsibility before they are mine.
As I listened, I had more realizations. I discerned that worrying about tomorrow was never God's idea. While CEOs and principals are tempted to worry during these challenging times, there’s a better way. This training opened my eyes to let go of my anxiety about tomorrow, and instead act with courage today like the Apostle Paul during the storm in Acts 27.
That chapter was fresh in my mind as I had just finished studying the book of Acts with my Bible study group. As Ereny broke the story down, I took my eyes off the concerns of tomorrow and started thinking about what I should do today. I decided to assess the situation, act with courage, and depend on God.
I was inspired when she shared from Acts 16:6-10, when Paul was planning to minister in Asia, but was hindered from going there. I resolved to submit my plans to God, get ready for the new direction He would provide, and take the right posture: on my knees. I had renewed confidence that God would help me chart the course.
Faculty and staff of Anita Methodist School
After the webinar, I met with the school’s administrative team over Zoom and I initiated spiritual practices to connect our hearts to God. I invited the team to an online Bible study, and I challenged them to freshen their prayer life. I shared my plans on how I am going to do it with them.
I also implemented courageous strategic steps with the team. We drew out plans to optimise our strengths in the coming academic year. We made admissions for new students an online process, and we accelerated our digital program efforts. I am all set to let God teach me to see His abundance and not what we lack. After all, it is God who sustains me and my team, not our salaries.
Pause to pray for Anita Methodist School. Also lift up to God, CEOs, principals, and ministry administrators everywhere, asking God to help them shift from worrying about tomorrow to acting with courage today. With you!
De preocuparse por el mañana a actuar con valor hoy: Anita Methodist School, CIM y GTP
Déjeme presentarme primero. Soy el director de Anita Methodist School (la Escuela Metodista Anita) en Chennai, India. Tenemos 120 empleados que trabajan juntos para servir a 2100 estudiantes hermosos. Estoy casado y tengo dos hijos adultos. Mi familia ama a Dios, y tengo su apoyo para sirvir a la escuela.
En todas partes de mi paseo personal con Dios y mi viaje como director de la escuela, Dios siempre ha cubierto mis necesidades. El nunca falla cuando le necesito. Dios estuvo presente en el seminario virtual organizado por Christian Institute for Management, donde escuché al Dr. Gary Hoag, CEO de GTP y a la Srita. Ereny Monir, Entrenadora Global de GTP.
Seminario virtual organizado el 24 de abril de 2020 por el Sr. Anand Joshua, Director Ejecutivo de la CIM y Facilitador Regional del GTP para Asia del Sur
Antes de participar en este entrenamiento interactivo virtual, yo estaba pasando por una temporada difícil. Acababa de terminar de coordinar cinco semanas de enseñanza en línea con cerca de 90 profesores para casi 2.000 estudiantes. No solo estaba físicamente exhausto, sino que había presiones emocionales también. Seguimos recibiendo noticias sobre la pérdida de empleos de algunos de los padres de nuestros estudiantes y esto nos trajo a todos una tristeza profunda.
Joan con estudiantes en Anita Methodist School
Además, la escuela se enfrentó a desafíos financieros. No estábamos seguros de cuándo podríamos cobrar las cuotas escolares debido al confinamiento. El personal había trabajado duro y se merecían sus sueldos. Pero, ¿cómo les pagaríamos? Las decisiones deben tomarse con los recursos financieros disponibles. Trabajé y restructure nuevas formas de pagar los sueldos.
Me sentía inseguro. Realmente me estaba afectando el bienestar de los maestros diligentes que necesitan sus sueldos y los padres que luchan para ser capaces de pagar la matrícula escolar. Me sentí agotado por mirar interminablemente hojas de cálculo y discusiones con el departamento de finanzas. Seguí suspirando y preguntando: "Señor, ¿qué debo hacer?"
El seminario virtual fue una respuesta a mis oraciones. Cuando se mostró la imagen de arriba del hombre arrodillado con la Biblia a su lado y Gary dijo que esa era la postura que debíamos tomar, dije: "Oh Señor, eso es lo que debo hacer..." También escuché "El trabajo que estamos haciendo es Suyo, no nuestro". El Espíritu de Dios me ayudó a ver que el personal son Su responsabilidad, antes que mía.
Mientras escuchaba, me di cuenta de muchas otras cosas. Discerní que el preocuparme por el mañana nunca fue la idea de Dios. Mientras los directores ejecutivos son tentados a preocuparse durante estos tiempos llenos de retos, siempre hay un mejor camino. Esta formación abrió mis ojos para dejar mi ansiedad sobre mañana y, en cambio, actuar con coraje hoy, como el Apóstol Pablo durante la tormenta en Hechos 27.
Tenía este capítulo fresco en mi mente ya que acababa de terminar de estudiar el libro de Hechos con mi grupo de estudio bíblico. Cuando Ereny explicó la historia, desvié mi atención de las preocupaciones del mañana y comencé a pensar en lo que debería hacer hoy. Decidí evaluar la situación, actuar con valentía y depender de Dios.
Me inspiraba cuando Ereny compartía sobre Hechos 16:6-10, cuando Pablo planeaba evangelizar en Asia, pero le fue impedido dirigirse allá. Yo decidí presentar mis proyectos a Dios, prepararme para la nueva dirección y tomar la postura correcta: arrodillado en oración. Había renovado mi confianza en que Dios me ayudaría a trazar el curso.
Facultad y personal de la Anita Methodist School
Después del seminario virtual, me reuní con el equipo administrativo de la escuela e inicié prácticas espirituales para conectar nuestros corazones con Dios. Invité al equipo a un estudio bíblico en línea, los desafié a refrescar su vida de oración, y les compartí mis planes.
También implementé pasos estratégicos con el equipo. Hicimos planes para optimizar nuestras fortalezas en el próximo año académico. Hicimos de las admisiones para nuevos estudiantes un proceso en línea y aceleramos nuestros esfuerzos del programa digital. Estoy listo para que Dios me enseñe a ver Su abundancia y no lo que nos falta. Después de todo, es Dios quien nos sostiene a mí y a mi equipo, no nuestros salarios.
